Hace unos días volví de mis anheladas vacaciones dieciocheras. Mi destino fue por segunda vez Pichilemu, balneario de la sexta región. También por segunda vez fui con las mismas personas, mis compañeros de universidad, osea de bachillerato y pololos y/o amigos de ellos. Lo pasé increíble, las fondas, asados, chichas y promos correspondientes estuvieron presentes nuevamente, pero este año hubo un nuevo motivo por el cual merece destacarse el viaje.
Ese motivo es mi inocente compra del pan...que terminó llevándome a la puesta de sol más hermosa que he visto en mi vida...No sé describir tal magia de colores y sensaciones que produjo en mi el maravilloso espectáculo, pero sólo ahora puedo entender el porqué esa playa es más que un lugar de surfistas.
Amé esas tardes, también la compañía de mis amigos, que complementados mirábamos el sol sin decir ninguna palabra...cada uno ensimismado por la maravilla.
* La foto fue tomada con mi celular, disculpen lo poco.
2 comentarios:
hola monicon
=)
tengo blog hace mil años y nunca lo he ocupado.. ya no hay tiempo para nada.
ay la foto fue tomada con mi elular la quebra, too pq yo tengo un celular antiguo y sin camara jajaja lo pusiste a proposito para que yo me sintiera mal jajajaja
hasta luego!
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